Susana Zazo Díaz | Psicóloga General Sanitaria
Las nuevas tecnologías (NTIC) han revolucionado la manera en que interactuamos y nos comunicamos con el mundo. Estas tecnologías incluyen, entre otras, internet, teléfonos móviles, las redes sociales, la inteligencia artificial o la realidad virtual y aumentada.
Internet es una de las tecnologías más importantes, ya que permite la comunicación en tiempo real entre personas de diferentes partes del mundo, el acceso a una cantidad infinita de información y la posibilidad de realizar diversas tareas de forma remota. La telefonía móvil, por su parte, nos permite estar conectados en cualquier lugar y momento, además de ofrecer diversas funcionalidades como la cámara fotográfica, el reproductor de música, el GPS y muchas más.
Las redes sociales, como Facebook, Instagram y Twitter, se han convertido en una parte importante de la vida cotidiana de muchas personas, ya que permiten compartir información y mantenerse en contacto con amigo@s y familiares. La inteligencia artificial, por su parte, está revolucionando muchos sectores, como la salud, la educación y la industria, gracias a su capacidad de procesamiento de datos y la automatización de procesos. Esto son sólo algunos ejemplos que nos permiten hacernos una idea del impacto que están teniendo en nuestras vidas.
Pero aunque las nuevas tecnologías ofrecen una gran cantidad de beneficios y oportunidades, también pueden tener efectos negativos en la salud y el bienestar de las personas, especialmente cuando se utilizan de manera abusiva o adictiva. Para ello, es importante tener conciencia de los riesgos asociados al uso excesivo de estas tecnologías.
¿POR QUÉ LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS GENERAN DEPENDENCIA?
Las nuevas tecnologías, como los teléfonos inteligentes, las redes sociales y los videojuegos, presentan una serie de características que las hacen altamente atrayentes, hasta el punto de no poder pasar sin ellas o generar “dependencias”.
Son potencialmente adictivas, entre otras cosas:
- Por su capacidad de activar el sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina, el neurotransmisor asociado con la sensación de placer y bienestar. Esta liberación de dopamina proporciona una gratificación y sensación de recompensa inmediatas, creando una sensación de euforia y felicidad en el usuario, lo que puede llevar a un comportamiento compulsivo y repetitivo en la búsqueda de esa sensación, como la búsqueda de likes, seguidores y comentarios positivos en las redes sociales.
- Por su accesibilidad y portabilidad: las nuevas tecnologías son altamente accesibles y portátiles, lo que significa que pueden ser utilizadas en cualquier momento, en cualquier lugar y con diferentes dispositivos (tablets, smartphones, ordenadores, etc.), lo que aumenta el riesgo de adicción. Además, nos permiten acceder a todo tipo de contenidos y estímulos, ya que nos brindan una gran cantidad de herramientas y plataformas para buscar, crear, compartir y difundir información de todo tipo. Gracias a la conectividad y la velocidad de internet, podemos acceder a una cantidad prácticamente ilimitada de información y recursos educativos, culturales, de entretenimiento, noticias, etc., lo que puede hacer que las personas se sientan más atraídas y dependientes de su uso.
- Por la rapidez de acceso y su funcionamiento las veinticuatro horas del día.
- Por la variedad de estímulos que ofrecen, como la posibilidad de mantenerse al día con las últimas noticias, la necesidad de responder a mensajes y correos electrónicos de manera inmediata y la búsqueda constante de estímulos visuales y auditivos.
- Por diversos factores sociales, como la oportunidad de compartir opiniones y comentarios o darse visibilidad. Esto último es especialmente importante en los/las adolescentes, que con frecuencia utilizan las nuevas tecnologías para reafirmar su identidad dentro de su grupo de iguales.
Por otra parte, la presión de grupo, especialmente en esta población, y el miedo a perderse algo importante, son factores psicológicos que pueden influir en su conducta, especialmente en las redes sociales, llevándolos a sentir la necesidad de estar siempre actualizad@s y conectad@s para no perderse las últimas tendencias, noticias o eventos sociales que estén ocurriendo en su entorno y ser excluid@s. Las redes sociales, en particular, también pueden fomentar la comparación social y la competencia, lo que contribuye a generar una dependencia a la aprobación y a la validación de los demás.
Es importante que seamos conscientes de estos factores para fomentar un uso saludable y equilibrado de las nuevas tecnologías.
¿CUÁLES SON LOS FACTORES DE RIESGO?
Existen varios factores que pueden aumentar la vulnerabilidad de una persona para desarrollar una adicción a las NTIC, entre ellos:
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Factores psicológicos: ciertos rasgos de personalidad, como la impulsividad, la ansiedad rasgo, la baja autoestima y la falta de habilidades sociales y de resolución de problemas, pueden aumentar el riesgo de desarrollar una adicción a las NTIC.
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Factores ambientales: el entorno social y familiar también puede influir en el desarrollo de una adicción a las NTIC. Por ejemplo, un ambiente familiar con poco apoyo emocional o conflictos interpersonales puede aumentar el riesgo de adicción.
- Presión de grupo: la influencia social y la necesidad de pertenecer a un grupo pueden hacer que los/las jóvenes se sientan obligados/as a usar las NTIC para mantenerse conectados/as con sus amigos y amigas y estar al tanto de las últimas tendencias.
- Estados emocionales. Las personas que experimentan niveles elevados de ansiedad o estrés pueden buscar refugio en las nuevas tecnologías, ya que les proporcionan una forma temporal de escapar de sus preocupaciones. Igualmente, la soledad o el aburrimiento pueden ser estados que lleven a las personas a recurrir a las nuevas tecnologías. La búsqueda de sensaciones fuertes y placenteras también se ha visto que contribuye a aumentar esta dependencia.
- Trastornos psicológicos: trastornos de ansiedad, del estado de ánimo, TOC, abuso de drogas, bipolaridad, trastornos de la conducta alimentaria, TDAH son algunos ejemplos.
Es importante tener en cuenta que ningunos de estos factores son la causa directa de la dependencia de las nuevas tecnologías, pero pueden contribuir a la vulnerabilidad de las personas a desarrollar una adicción a las nuevas tecnologías.